LOS POTENCIALES CANDIDATOS COMO YOMA Y DÉLFOR BRIZUELA NO SUPERAN EL 6 POR CIENTO DE INTENCIÓN DE VOTO
Julio Martínez y Bordagaray, solo con la bandera del “Famatina no se toca”, se perfilan para quedarse con las dos bancas en el 2013. Midieron a Ada Maza y no figura Felipe Álvarez. Todos son números que maneja la Nación.
El gobierno nacional midió –como hace siempre- todo el país para conocer, lo que todos dicen: la inflación es el arma letal contra la administración de Cristina Fernández de Kirchner. Sin embargo, al no tener una oposición fuerte, el proyecto por ahora no está en peligro, ya que la agenda se hace y deshace desde la Plaza de Mayo.
El caso de La Rioja es más que interesante, ya que aquí se da una paradoja porque el gobierno podría perder un representante en el Congreso de la Nación en las elecciones legislativas del año próximo, donde se ponen en juego las bancas de Jorge Yoma (Frente para la Victoria-PJ) y Julio Martínez (UCR) respectivamente.
Según números de los despachos del gobierno nacional, la administración de Luis Beder Herrera no tiene candidatos para los comicios legislativos de octubre del año próximo.
En ese marco, aparecen Julio Martínez y el intendente de Famatina, Ismael Bordagaray, con amplias chances de quedarse con las dos bancas legislativas en juego, si hoy fueras las elecciones, mientras que los potenciales candidatos bederistas Yoma y el actual diputado provincial Délfor “Pocho” Brizuela no superan el 6 por ciento de intención de voto.
Y figura también la ex senadora y actual directora del Banco Hipotecario, Ada Maza, entre las medidas, pero hay un 18 por ciento de indecisos.
Si el gobierno no consigue candidatos, Ada Maza encabeza la lista para que el actual gobernador la apoye por pedido presidencial. No está en el listado, el ministro de Gobierno, Felipe Álvarez, pese a su proyección que se le dio desde la Casa de las Tejas.
El desgaste propio del gobierno de Beder Herrera se transmite a sus potenciales candidatos y aún más que el riojano siempre le da otra cuota de poder a la oposición en las elecciones legislativas, por lo cual –según los antecedentes- el radicalismo ha sido uno de los grandes beneficiados.
Así el tándem Martínez y Bordagaray ganan espacios sin casi nada de recursos y solo con la bandera del “Famatina no se toca”.
El radical tiene una gran preponderancia en Chilecito y Bodagaray, a través del trabajo del sector del intendente Ricardo Quintela, se ha posicionado en el departamento Capital, bastión que define cualquier elección.
La Nación ha tomado nota de esos primeros números y por eso, ya empezó a escuchar (nada más) la posición asumida por el intendente de Famatina en su enfrentamiento con el gobernador. El primer gesto nacional sería el financiamiento de una serie de obras pequeñas, pero grandes para el departamento del oeste.
Y en eso saldría beneficiado también Quintela, aunque al gobierno nacional le disgusta que otra vez la banca que pone en juego el radicalismo siga en manos de ellos. Por lo cual, espera que el gobierno provincial busque un candidato potable para intentar arrebatarle el sillón de Martínez, más cuando tiene el apoyo la Casa de Gobierno de casi todos los intendentes y diputados.
Aunque Yoma se vende como el candidato elegido por Beder Herrera, la propia presidenta le bajó el pulgar, ya que aspira a una renovación. Esa situación desencadenó en un rally mediático de Yoma, quien adelantó su oposición a otro mandato de la Presidenta y defendió los fondos del Banco Ciudad en la Cámara Baja.
Luego –en forma sorpresiva- empezó a decir que hay otros candidatos para que sigan el proyecto del actual gobernador en consonancia con el jefe comunal de Arauco, Gustavo Minuzzi. Se entendió también que el primer apoyo de Beder Herrera a Yoma se empieza a desvanecer, tras algunas “sugerencias” desde el gobierno nacional.
El año que viene se reeligen dos bancas de diputados nacionales y el 50 por ciento de la Legislatura provincial
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