A TODOS LOS EQUIPOS QUE HAN VENIDO A LA PROVINCIA LOS HA SORPRENDIDO DE MALA MANERA LAS CONDICIONES DE LOS “ESTADIOS DE FÚTBOL”.
Deja sin palabras tratar de defender lo indefendible cuando las provincias vecinas tienen no solo estadio de fútbol sino complejos deportivos para albergar todas las disciplinas.
La agresión que sufrió el jugador de Tesorieri, Nicolás Herrera, supuestamente por parte de Juan Pablo Ceballos, llevó los ojos hacia el fútbol riojano. Más allá del cobarde ataque, el futbol de La Rioja está representado en el Torneo Argentino B tanto por Tesorieri y Andino.
Ambas instituciones, a través de sus dirigentes y el aval estatal a cambio de la insignia La Rioja Minera, ilusionan a los amantes del fútbol, que quisieran que los equipos riojanos enfrentaran a Boca, River, entre otros grandes, como en algún momento sucedió.
Pero la foto publicada en el sitio Futbol Riojano tiene que hacer un llamado de atención sobre la política deportiva en la provincia. Hoy las canchas riojanas ninguna brinda el mínimo de seguridad para los jugadores como los asistentes, pero es tan habitual, que es noticia que una cancha logró tener agua potable en sus vestuarios.
A todos los equipos que han venido a la provincia los ha sorprendido de mala manera las condiciones de los “estadios de fútbol” y con críticas también de los medios de comunicación, ya que no están ni las mínimas condiciones de trabajo.
Deja sin palabras tratar de defender lo indefendible cuando las provincias vecinas tienen no solo estadio de fútbol sino complejos deportivos para albergar todas las disciplinas. Con solo viajar menos de 200 kilómetros se llega al estadio Centenario de Catamarca o hacer el doble de recorrido se va a San Juan, con un predio mundialista.
La gran noticia a fin de año será la reinauguración del estadio de Vargas, que pese a la lavada de cara, seguirá siendo el mismo reducto que quedó dentro de un populoso barrio y con una infraestructura añeja.
Alguien con sentido común y amante del deporte le debe llegar a lo más profundo de su ser que esas canchas son la cara del fútbol riojano, cuyas fotos se publican en medios gráficos de todo el país, como las imágenes de difunden en el vasto territorio argentino.
Con el mismo interés demostrado por un acto político frente al Paseo Cultural debería ser el trabajo en pos de salir en auxilio del deporte, no solo de Tesorieri y Andino. Es muy triste escuchar de boca de los jugadores “profesionales” que el mejor recuerdo que tienen de su paso por Córdoba u otra provincia, es que se han duchado con agua caliente.
O que hay baños en buenas condiciones, no solo para ellos, sino para sus respectivas familias que los acompañan cada fin de semana.
Ver la cancha de Andino o la cancha Oficial, donde la medianera no cae por las buenas de Dios, debe provocar una mínima reacción de quienes toman decisiones, esos mismos que entregan las camisetas “La Rioja Minera” para que estén en los pechos de los jugadores cuando recorren el país.
De qué fútbol se puede hablar, de qué política deportiva cuando un acto es más importante que nuestros jóvenes, esos que a través se mantienen ocupado en el deporte y se alejan de los malos hábitos.
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