Al intendente de Chilecito le cerraron por impago la cuenta en un bar donde atendía a vecinos

Al intendente de Chilecito le cerraron por impago la cuenta en un bar donde atendía a vecinos.

El establecimiento le cerró la cuenta que tenía el jefe comunal Nicolás Lázaro Fonzalida, por mantener una deuda por consumiciones impagas desde hace cinco meses

El bar del Automóvil Club Argentino de Chilecito le cerró la cuenta que tenía el intendente de esa ciudad, Nicolás Lázaro Fonzalida, por mantener una deuda por consumiciones impago desde hace cinco meses.

El kirchnerista Fonzalida solía realizar hasta días atrás reuniones en el bar del ACA, donde atendía a funcionarios, concejales, empresarios y vecinos en una mesa del salón.

El jefe comunal se hizo habitué del bar al punto que, según el diario Chilecito, lo usaba casi como "despacho" hasta que le cerraron la cuenta corriente porque no pagó "17.000 pesos" de deuda por desayunos, café y hospedaje de invitados de la comuna.




Al parecer, los reclamos del personal del bar recibían como respuesta desde la comuna el argumento de que no podían saldar la cuenta porque "el gobernador no envía los fondos".

Empleados municipales consultados por el periódico precisaron que la deuda era "de 9.000 pesos en servicio de bar, llámese desayunos, almuerzos y cenas, más agasajos que organizaban ahí".

También se registraron cuentas de alojamiento, como las pagadas a pilotos de motocross, de entre 480 y 575 pesos por noche.



Los reclamos del personal del bar recibían como respuesta desde la comuna el argumento de que no podían saldar la cuenta porque "el gobernador no envía los fondos"Los responsables del ACA evitaron dar mayores detalles a la prensa sobre el informe y dijeron: "No podemos ampliarles" la información.



Fuentes cercanas al bar, en tanto, admitieron que "el municipio tiene cerrada la cuenta por falta de pago, pero es una cuestión administrativa que seguro en breve se solucionará".

Pobladores de Chilecito reconocieron a la prensa que Fonzalida "siempre atendía ahí" en el bar del ACA.

Algunos apuntaron que "cualquiera que pasaba por la puerta era invitado a sentarse y consumir", como concejales, asesores y funcionarios.