miércoles, 11 de agosto de 2010

Juez federal citó a quienes cortaron la ruta por el avión rompetormentas

CHEPES 



 El juez federal Daniel Herrera Piedrabuena de La Rioja, fijó audiencia para hoy, a siete participantes del corte de la ruta nacional 141, entre ellos un septuagenario, el sonidista contratado y Ramiro Mena, hijo de Ana María Lanzillotto, secuestrada y desaparecida embarazada junto a su esposo durante la última dictadura militar.

La audiencia fijada por el juez Federal es para hoy a las 8 de la mañana, "a los fines de que designe el defensor que lo represente" en las actuaciones que lleva adelante en el expediente Nº 6856/10 caratulados "Averiguación infracción Art. 194 del C. P.", y mediante el cual el magistrado investiga la participación y responsabilidad de los citados en el corte de la ruta nacional 141 (Chepes-San Juan), practicado en los primeros días de febrero pasado, en protesta por las actividades de aviones en los frentes de tormenta, popularizados como "avión rompetormentas". 

Por el hecho que es motivo de investigación judicial, fueron citados Ramiro Nicolás Mena, -hijo de Ana María Lanzillotto y Vicente Mena -ambos secuestrados y desparecidos durante el gobierno de la última dictadura militar en Argentina- y nieto del célebre riojano Nicolás Lanzilloto, cuyo nombre lleva la escuela 114 de esta ciudad.

Además de Mena, deberán comparecer ante el juez, Leonardo Omar Fernández, Raúl Esteban Milán, Pedro Rolando Airaudo, Juan Oscar Riquelme, Teódulo Francisco Amaya y Ana María Pereyra, de los cuales Riquelme es un contratado por los manifestantes por sus servicios de propalación y Amaya un pequeño productor caprino de setenta años de la vecina localidad de Ñoqueve.

Los citados se presentarán hoy ante el juez Piedrabuena, con su abogado defensor, el Dr. Nicolás Eduardo Mercado.

LOS CORTES

La noticia provocó "sorpresa" tanto en los imputados de provocar el corte de ruta como de un importante sector de la comunidad, que comenzó a manifestarse por distintos medios en apoyo de quienes desde hace más de una década emprendieron una lucha, ahora transformada en causa, que tiene como objetivo saber cuáles son las actividades que desarrollan una flotilla de aviones de pequeño porte en los frentes de tormentas, exclusivamente en los meses de primavera y verano.

Esa lucha involucra no solamente a los siete citados por el juez, sino que tiene sus raíces en cada pequeño productor ganadero o caprino, que fueron quienes en cada corte de ruta la poblaron, protestando por las actividades de los aviones en los frentes de tormenta, luego de lo cual, éstas generalmente se disipan, de allí el "mote" de "avión rompetormentas".