Los profesionales que se reúnen los sábados para jugar al fútbol protagonizaron un escándalo que trascendió más allá del predio donde se reúnen para distenderse. Médicos, kinesiólogos, arquitectos y odontólogos fueron sancionados por el Tribunal de Disciplina. Rencores, broncas y tensiones retenidas son liberadas en la cancha de juego a cualquier costo.
El fútbol, pasión de multitudes, es el escenario donde las agresiones se reproducen con gran frecuencia. Sin embargo, entre personas que se jactan de ser serias, eficientes y calificadas en su profesión e incluso que antes de tener nombre tienen título, resulta más sorprendente.
Es frecuente, sobre todo en La Rioja, que cuando los profesionales están fuera de su consultorio o estudio, se hacen llamar doctor, licenciado, ingeniero o arquitecto en una verdulería, en un cine o tramitando algo que no tienen nada que ver con la profesión.
Es que para muchos el título es mucho más de lo que figura en el pergamino colgado con un llamativo marco en el centro de su lugar de trabajo. El título universitario los convierte en “alguien”, incluso independientemente de su calidad y capacidad como profesionales. Sin embargo, el sábado 31 de octubre quedó claro, una vez más, que para mostrar calidad personal un título poco tiene que ver. Médicos del INCOR y Kinesiólogos fueron los protagonistas de uno de los partidos más violentos que se recuerde entre profesionales.
Todos los sábados cerca de 500 jugadores de diversas profesiones participan de un campeonato de fútbol en el Colegio Médico, forman 20 equipos y muchos asisten con sus hijos. La mayoría lo hace con fines amistosos con la idea de compartir, juntarse, divertirse. Aunque en rigor de verdad, estos fines fueron olvidados. Y para lamento de muchos no es la primera vez que sucede.
El sitio Professionale.com.ar realiza la cobertura de estos partidos y relató lo que sucedió paso por paso:
Todo comenzó cuando uno de los jugadores de los médico cargó al arquero rival. Esto provocó que uno de los compañeros del guardavallas lanzara la pelota en la cara a su contrincante. A partir de entonces, se vivió una situación inentendible en personas adultas. Los dos equipos se confundieron en una gresca que incluía no sólo trompadas, sino también patadas a adversarios circunstanciales que quedaban indefensos tendidos en el suelo.
Para ser más precisos: 1-Un jugador de INCOR comete falta contra el arquero. Carozo Herrera (quinesiólogo) le tira la pelota en la cara; 2- Se desata la bataola, Olivera provoca a Cacho, se suma Ayan (médico) desde el banco y comienzan a correr con patadas y trompadas a Carozo. Atras Cacho es derrivado por el 4 de INCOR y es pateado en el suelo. Se puede ver a un jugador de INCOR tirando patadas voladoras; 3- Carozo comienza a correr; 4- Todo parece calmarse.... hasta luego de un par de horas.
Por la tarde, cuando todo parecía haber vuelto a la normalidad, la gresca se volvió a generar. El resultado: una semana después los jugadores fueron suspendidos por el Tribunal de Penas.
Si estimado lector, estamos hablando de los mismos profesionales que seguramente a usted lo atendieron alguna vez en su consultorio con impecable chaquetilla o guardapolvo blanco y le revisaron la garganta, el corazón o le acomodaron un hombro, o lo recibieron en su estudio jurídico de traje y corbata o le diseñaron los planos donde piensa vivir los próximos 50 años.
consultó sobre estas reacciones a un psicólogo del medio quien prefirió no dar su nombre. El especialista explicó que si bien es normal que quienes desempeñan tareas de mucho estrés liberen tensiones en una cancha de fútbol y puedan volverse más agresivos, también se juegan otros aspectos más vinculados a los resentimientos y broncas a veces personales. “Vivimos en un medio chico, en La Rioja nos conocemos todos. Seguramente en muchos casos la gente canaliza algunos enojos con los colegas o con algún jefe metiendo una patadita o un gancho y eso después puede provocar una pelea mucho mayor”.
Sanciones
El miércoles 4 de noviembre el Tribunal de Penas se reunió y resolvió aplicar sanciones, quita de puntos a los equipos y suspensiones para los jugadores. A partir del acta Nº 10 aplicó sanciones individuales a los protagonistas que van de 18 a 24 meses en base al reglamento de la AFA. Los equipos INCOR y Kinesiólogos también fueron sancionados con quita de puntos. El Tribunal dispuso:
1. Sancionar al jugador Quintar Gonzalo del equipo Incor con 18 meses de suspensión, Art 9, Inc. ñ.
2. Sancionar al jugador Parisi Pablo del equipo Incor con 24 meses de suspensión, Art 9, Inc. ñ.
3. Sancionar al jugador Fernández Gabriel del equipo Incor con 18 meses de suspensión, Art 9, Inc. ñ.
4. Sancionar al jugador Ayan Javier del equipo Incor con 24 meses de suspensión, Art 9, Inc. ñ.
5. Sancionar al jugador Olivera Osvaldo del equipo Incor con 24 meses de suspensión, Art 9, Inc. ñ.
6. Sancionar al jugador Morella del equipo Incor con 18 meses de suspensión, Art 9, Inc. ñ.
7. Sancionar al jugador Herrera Jorge del equipo Kinesiólogos con 24 meses de suspensión, Art 9, Inc.
8. Sancionar al jugador Herrera Claudio del equipo Kinesiólogos con 24 meses de suspensión, Art 9, Inc.
9. Se dispone sancionar al equipo del Incor, con la quita de 24 puntos al finalizar el presente campeonato.
10. Se dispone sancionar al equipo de Kinesiólogos, con la quita de 12 puntos al finalizar el presente campeonato.
11. Sancionar al jugador Leonardo Foresi del equipo Arquitectos con 2 fechas de suspensión, Art 9, Inc. e.
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