Si bien en términos absolutos, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) lidera el ranking de morosidad por jurisdicción ($ 5.705 millones), la provincia con mayor porcentaje de mora (en relación a su propio stock de préstamos) es Tucumán, con un coeficiente del 8,9%, seguida por Río Negro y La Rioja (8,4% y 7,5%), indica el reporte de Economía & Regiones.
Por su parte, las jurisdicciones con menores problemas de pago resultaron Misiones (2,1%), Córdoba y Santa Fe (2,4%). En el NOA, después de Tucumán, el mayor nivel de morosidad bancaria lo tiene Santiago del Estero, con un 5,6% de la cartera en esa situación, según el Banco Central. Le siguen Salta (3,3%), Catamarca (3,1%) y Jujuy (2,8%).
En cuanto a la apertura por rama de actividad, se advierte que el mayor grado de morosidad lo presenta el sector de la construcción, con un 4,9% de los préstamos contraídos, seguidos por los asalariados (4,3%).
En valores absolutos, estas dos actividades concentran el 48% de los créditos en mora, destacándose el aporte de los asalariados, con el 45% del total ($4.483 millones).
Por su parte, los sectores con menores dificultades en el pago fueron la Producción Primaria (1,7%), Electricidad, Gas y Agua (1,8%), Comercio (2,2%) e Industria Manufacturera y Servicios (ambas 2,9%).
Por su parte, el 31 de diciembre de 2011, el stock de préstamos a los asalariados alcanzó a $ 104.164 millones. El 64% de los mismos se distribuyó entre la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (39%) y la Provincia de Buenos Aires (25%).
En tanto, Santa Fe y Córdoba participaron con otro 5% del total, mientras Tucumán y Mendoza, lo hicieron con un 3%, correspondiendo el 20% restante a las otras 18 jurisdicciones subnacionales.
"En promedio, estas líneas de préstamos se expandieron un 46% entre diciembre de 2010 y el mismo mes de 2011. Vale aclarar que todas las provincias presentaron una variación positiva en los stocks de préstamos", dice un informe de Economía & Regiones.
Particularmente las provincias de Corrientes y Tucumán fueron las que observaron la mayor expansión (67% y 65%, respectivamente), mientras que las jurisdicciones que presentaron las expansiones menores fueron Neuquén y La Rioja (31% y 33% respectivamente).
En el caso de Tucumán, el total de préstamos a asalariados alcanzó en 2011 los $ 3.022 millones, con un promedio de $ 17.665 por trabajador del sector privado. Ese monto equivale a 4,8 veces el salario promedio de un empleado privado ($ 3.689), de acuerdo con el reporte privado. La suma es casi equivalente al promedio nacional.
En el NOA, los préstamos se dirigen mayormente hacia los asalariados, especialmente en las provinciales con menor desarrollo. Según la Fundación del Tucumán, del monto total de créditos autorizados en la región ($ 13.517 millones a diciembre de 2011), un 57,4% está constituido por préstamos para personas físicas en relación de dependencia, cifra que se acerca más a la situación de Salta y Tucumán.
En Catamarca, Jujuy y Santiago del Estero ese porcentaje es superior al 70%.
La segunda actividad más financiada es la producción primaria -principalmente agrícola- especialmente en Salta y Tucumán, que acapara el 17% y 16% respectivamente del total. Servicios se encuentra en tercer lugar, recibiendo el 8,8% de los créditos en la región.
Hay que notar que el porcentaje de financiamiento que recibe esta actividad es muy inferior al que se observa a nivel país donde es 24,6%. Por lo tanto, indica el reporte, el crédito en la región además de ser escaso, menos del 40% se destina a financiar actividades productivas y de servicios en el corto y mediano plazo -el financiamiento a largo plazo es prácticamente inexistente-.
"Esto representa un importante obstáculo para el desarrollo de las economías regionales, al ser muy bajo el financiamiento para las PyME que son los motores del crecimiento local", acota.
El federalismo tampoco se demuestra en los indicadores del movimiento financiero. Hay una alta concentración de los capitales en los grandes centros de consumo. Capital Federal, por caso, absorbe el 53% de los préstamos, mientras que la provincia de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba suman 30%.
En las otras 20 provincias se divide el 17% del monto total prestado. Para los depósitos la concentración es similar; esta es una tendencia que se mantuvo en el tiempo e incluso se profundizó durante la última década, según el análisis regional que elaboró el área de Economía de la Fundación del Tucumán para el diario La Gaceta.