miércoles, 14 de julio de 2010

LA CIUDADANÍA DEBE SER INFORMADA



El espíritu creativo e industrioso de los argentinos está asolado por el clima de tensiones sociales, que van desde las urgencias diarias e inseguridad personal hasta la falta de esperanza en un futuro de prosperidad y armonía social. La desilusión en la frase “yo no veré ese futuro” se repite diariamente, pero no debe ser así. La esperanza no es alcanzar el objetivo: es esforzarse para que un día se alcance, y renace con los pequeños triunfos. No importa que no se llegue a ver la tierra prometida. Los hombres de buena voluntad lo saben.
 La ciudadanía debe hacer suyos los urgentes objetivos nacionales que son:- 

1) Eliminar la pobreza, duplicando las exportaciones y con una fuerte inversión privada productiva, que crearán oportunidades de trabajo y mejoras salariales reales. Está a la mano de los argentinos hacerlo;-

 2) Combatir la corrupción y el crimen organizado, en el Estado y en las mafias, modificando el Código Penal y con la activa participación ciudadana;- y 

3) A mediano plazo, enmendar la Constitución para impedir la autocracia presidencial, la destrucción del federalismo y que el gobierno sea del pueblo.
Alcanzar esos objetivos, requiere informar masivamente a la ciudadanía de los beneficios que reportarán a la sociedad, a la prosperidad personal y a la estabilidad institucional. El apoyo del pueblo es indispensable.