Vacunación
TAN DIFICIL ES PROGRAMAR, PLANIFICAR, DISTRIBUIR,FRACCIONAR, LAS LICENCIAS DE LOS PROFESIONALES O NO EXISTE UN CONTROL DE PERSONAL ??? CUANDO NO HAY CONDUCCION NO HAY ORDEN
La falta de personal en el servicio de Vacunación del hospital regional Luis Pasteur hizo que el público debiera retornar a sus hogares, ya que no había quién aplique a los pequeños las dosis correspondientes.
Todo ocurrió ayer en horas de la mañana en el centro de salud local cuando un número importante de madres llegaron con el propósito de hacer vacunar a sus hijos. Grande fue la sorpresa cuando se anoticiaron de que no había personal en el servicio de Vacunación que pudiera realizar dicha tarea. Sólo se encontraba la responsable del servicio, "la química Silvia Flores Peiretti", según señalaron fuentes confiables a NUEVA RIOJA.
Siempre según datos aportados por fuentes confiables, al parecer todo el personal encargado de realizar la vacunación se habría tomado vacaciones o en su defecto faltó y no informó de su ausencia.
La consecuencia fue que muchos niños se debieron volver a sus casas sin haber recibido la vacuna correspondiente, con el inconveniente propio que eso implica.
Seguramente este tema fue planteado a las autoridades hospitalarias para que "hoy no vuelva a ocurrir lo mismo y para que el personal tome conciencia que todos tiene el derecho a descansar pero el Estado ha fijado pautas de cómo se debe tomar las licencias", señalaron a NUEVA RIOJA algunas madres que se encontraban ofuscadas.
Falta de profesionales
Además, la falta de profesionales en el nosocomio local se hace sentir mucho más en esta época del año, oportunidad en la cual la mitad de los profesionales se toman su merecido descanso mientras el resto cubre los servicios.
No obstante, cuando la cantidad de profesionales no es la suficiente para hacer frente a la demanda, siempre hay aparejados malos entendidos.
Un hospital de la magnitud del Luis Pasteur, con una población para atender que ronda los 15 mil habitantes, sin contar la demanda de la región, no puede estar al frente de cuatro o cinco profesionales médicos. Si se tiene en cuenta que en días comunes muchas veces los profesionales no pueden hacer frente a la demanda, mucho menos logran cubrir las necesidades en épocas de descanso.
A tal punto llega la falta de profesionales en el hospital local que los mencionados médicos deben tomar su receso obligatorio en varias tandas, por lo que han debido fraccionar sus vacaciones para que todos puedan tomarse su merecido descanso.
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