Es por la faena indiscriminada que se advierte en el interior del país, especialmente en Catamarca, Salta, Jujuy, La Rioja y Córdoba, de acuerdo con un informe publicado recientemente
La supervivencia del burro podría peligrar en los próximos años, de mantenerse la faena indiscriminada que se advierte en el interior del país, especialmente en Catamarca, Salta, Jujuy, La Rioja y Córdoba, de acuerdo con un informe publicado por El Ancasti.
Con el título "Pasión y muerte del burrito catamarqueño", el periodista Fernando Sánchez Zinny dedicó un artículo a este tema en El Ancasti, en el cual analiza la situación vinculándola con una serie de referencias que permiten valorar el significado de este animal, más allá de su rol estrictamente ecológico.
"Tan criollo es el burro y tanta aceptación le damos y tanta fábula nos ha proporcionado y, sin embargo, apenas si lo conocemos, y en cuanto a las personas jóvenes casi ni lo han visto a no ser en ilustraciones, fotos, dibujitos. Tan criollo y tan español, por supuesto, y es por eso que para las fiestas se viene -mallorquino o catalán, que así se llaman sendas razas- "cargaíto e turrón", siendo, además que, como bien sabemos, bastante tiene que ver con la devoción de esas fechas y no por casualidad es que resulta infaltable entre las figuras del Pesebre, tras haber sido el encargado de llevar a la Sagrada Familia a Egipto y de sustentar al mismísimo Jesús en su entrada triunfal en Jerusalén.
Quizá por ser de más seguro andar en terrenos escarpados que el caballo es que debe haber habido muchos tierra adentro, pues nuestra imagen de las provincias "arribeñas" está -o estaba- entrañablemente vinculada con los burros. Salta o Jujuy, Catamarca o La Rioja, y Córdoba, sobre todo, acerca de la cual basta recordar aquella clamorosa burla porteña al ser derrocado Juárez Celman: ´Y ya se fue, / y ya se fue, / el burrito cordobés / por la calle Santa Fe`", relata el escrito.
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