La policía y los bomberos lo rescataron de un aljibe de unos 10 metros de profundidad. Lo encontraron inconsciente, por asfixia por inhalación de hidrocarburo. Estaba pintando el pozo con pintura asfáltica y el encierro le provocó una descompensación, pérdida de conocimiento y quedó desmayado en el interior del mismo, agarrado de una escalera, según informaron al diario digital El Cronista.
Uno de sus hijos, fue quien lo encuentra, cuando promediaba la hora 18 y dio aviso a la policía. Minutos después acudieron al auxilio tres efectivos policiales y los bomberos voluntarios de esta ciudad de Chepes, quienes lograron rescatarlo y trasladarlo al hospital “luís Pasteur”, donde quedó internado hasta el día de la fecha.
Su hija Marisa, informó que felizmente se encuentra en perfecto estado de salud, al mismo tiempo que agradeció a los médicos José y Nicolás Yaryura por la excelente atención que le brindaron a su padre.
El suceso tuvo lugar en la casa del docente y gremialista de 70 años, Antonio Arrieta en la tarde del día jueves 25 de septiembre.
“Fue un verdadero milagro que mi hermano lo encontró, sino hubiésemos estado lamentado lo peor”, comentó Marisa, agregando que “en este momento ya está en casa y gracias a Dios está muy bien”.
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