Todo sucedió muy rápido. Tras tomar fotos se empezó la filmación con un celular con la intención de mostrar en vivo el peligro. Ahí apareció un auto de frente al periodista y, de pronto, otro detrás que casi impactó a la manada. Por Gustavo Martínez Puga
Captura del momento en que un Fiat Palio color gris frena a fondo en la Ruta 141 para evitar impactar a los caballos sueltos. El video completo en www.tiempodesanjuan.com
La rayada del Fiat Palio color gris, los equinos que se espantaron y, afortunadamente, pegaron la vuelta en lugar de cruzar la ruta… sino el impacto habría sido casi inevitable.
Todo ocurrió en segundo, de repente, no dio tiempo a nada. El silencio duró una eternidad. Lo primero que la fotógrafa y éste cronista atinaron hacer es continuar con la mirada al vehículo, para ver si frenaban, si estaban bien o no después de semejante susto. Es que debían haber quedado shockeado de haber estado tan cerca de un accidente. Pero el vehículo siguió su marcha.
Cuando el ánimo volvió al cuerpo, la fotógrafa le comentó a este cronista: "Todavía me tiritan las piernas. No lo puedo creer lo cerca que estuvieron de chocar. Vámonos de acá ya a la policía”.
Inmediatamente se generó una discusión inevitable: "Le deberíamos haber hecho advertido de los animales sueltos”. Sin lugar a dudas, pero la aparición del Fiat Palio fue muy rápido, no dio tiempo a nada. Y tal vez cualquiera que se detenga unos minutos en esa ruta puede enfrentarse a esta situación espantosa, con la diferencia que como periodistas reflejamos ese instante de alto impacto con la intención de que se tomen medidas y no se vuelvan a producir más muertes.
Todo esto ocurrió a solo 1 kilómetro al Este del control policial caminero de Bermejo, antes de llegar si se sale desde San Juan. A esa altura, al Norte, se divisan los árboles y se escucha con total claridad los ruidos de las radios y de los perros ladrando de la gente que vive en el pueblo de Bermejo.
El video se filmó en momentos que se hacía una recorrida por la ruta que tantas muertes provocó por los animales sueltos. Pero, en particular, se estaba constando personalmente si algo había cambiado al año de una tragedia que conmovió profundamente a los sanjuaninos: la muerte de Ana Yossa y sus dos hijos, Santiago y Ernestina.
"Con razón el hombre tenía la voz quebrada… lo noté como llorisqueando. Me dijo que se le habían atravesado unos animales”, comentó con sargento que controlaba los vehículos sobre la Ruta Nacional 141 en la mañana del martes 7 de julio último.
No era para menos: milagrosamente no había chocado con una manada de caballos.
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