miércoles, 3 de marzo de 2010

Dialogamos con los Riojanos que sufrieron el Terremoto en Chile

Radio Fénix dialogó en directo con Maximiliano Bóveda (26), uno de los cuatro riojanos que permanecían desaparecidos desde el terremoto de 8.8 grados que sacudió al país vecino. Todos están en perfecto estado y se reunirán con Pastor Machado y Ramón Bóveda, en el barrio Chiguallaste de la devastada ciudad de Concepción. Debido al comienzo del toque de queda, recién podrán partir mañana jueves hacia Argentina.

“Fue un momento muy desagradable, las casas parecían que tenían ruedas. Yo no podía salir de la habitación donde estaba. Ahí nomás llegó el tsunami. Instantáneamente se cortó la luz y el agua. Es algo muy terrible. Gente que desapareció, gente muerta” así describió Maximiliano Bóveda la catástrofe que le tocó vivir en Chile.

Hoy hubo una fuerte réplica en la ciudad de Concepción y la alerta de tsunami volvió a activarse. Los riojanos estiman que recién mañana podrán emprender su regreso.
Cristian Bazán de La Fuente (15), Maximiliano Bóveda (26) Sergio Romero (19) y Mario Nicolás Bazán (40) hacía apenas una semana habían llegado a la ciudad de Concepción para probarse futbolísticamente.

Pero el terremoto y la consecuente marejada que azotó a la ciudad se lo impidieron. Desde la madrugada del sábado pasado no había ninguna noticia de los cuatro coprovincianos.

Ayer martes, Pastor Machado y Ramón Bóveda, familiares que viajaron en busca de los desaparecidos, mediante mensaje de texto informaron a Radio Fénix que habían logrado encontrar en buen estado a Sergio Romero (19) en la localidad de Talcahuano y se aprestaban a partir hacia la ciudad de Concepción.

En diálogo con Radio Fénix el embajador argentino, Gines González García dijo que estaban puestos todos los recursos del consulado en la búsqueda de los riojanos. Pero parece que no fue así. Solo la voluntad de los familiares logró dar con los riojanos.
Todos están bien

“Recién acabamos de llegar a Concepción, las rutas están muy precarias para llegar, pero ya estamos con Maxi Boveda y con el chico Bazán. Falta ver al chico Romero. Todos están bien” informó Pastor Machado en directo desde Chile.

“Estamos en Chiguallaste un barrio de Concepción. La comunicación recién se comenzó a restablecer hoy. Acá anoche llegó la luz, pero no hay agua. Pasamos por una estación de servicio y hay colas de tres cuadras de gente con bidones. Nosotros andamos con bidones en el auto para poder volver. Tomamos esa precaución” indicó Machado.

Por su parte, Ramón Bóveda, padre de Maximiliano informó que recién el jueves podrán comenzar el regreso a la Argentina debido al toque de queda que rige en la zona por los saqueos y la violencia desatada luego del sismo.
El testimonio de Maximiliano Bóveda

“Yo estaba en un segundo piso. En otra habitación estaba Cristian Bazán. Parecía que estaba pasando un tren. Yo recién me acostaba. No podías estar en pie, golpeabas con todas las cosas. La puerta se trabó y no podía salir. Pero en ese momento no había seguridad ni dentro, ni fuera de las viviendas. Fuera se caían los árboles, los postes de luz. La mayoría de los muertos están acá. Hay gente que murió en las calles.

“Cuando salímos estabamos todos abrazándonos. Con mi novia y su familia. Tratábamos de tranquilizarnos, porque había réplicas de 5 y 6 grados y uno no duerme. Ahora hay caos, porque no hay suministros. La gente comenzó a saquear y todo se volvió muy peligroso.

“Acá fue el epicentro del terremoto de 8.8 grados. Nosotros estamos a 15 minutos del mar, al lado de un rió que llega al mar. Por allí avanzó la ola que arrasó con gran parte de la ciudad.

“Nosotros intentamos ir hasta el consulado para avisar a nuestras familias que estábamos bien. Pero no podíamos llegar. Hay toque de queda de las seis de la tarde hasta las 12 del mediodía. Anoche recién volvió la luz y no podíamos salir”.
Aún resta una desaparecida

Hasta el momento no hay información fidedigna sobre el paradero de la quinta mujer riojana desaparecida luego del terremoto.

Se trata de Lastenia Margarita Herrera Peralta, de 52 años de edad, quien es oriunda de la ciudad de Aimogasta, pero hace treinta años que está radicada en Juricó, cerca de Talca, junto a su marido Álvarez Pena, y sus dos hijos, Noelia y Felipe.